La espera,

Puede ser una espera en vano, pero toda espera es también una etapa de tiempo en la que invertimos una cuota de realidad y otra de fantasia. La realidad tiene que ver con los punteros del reloj o el tic-tac del cuarzo, con los amaneceres y el paso de las estrellas o el viento. Es pura materia.

La otra parte, quizás la mayor parte, tiene que ver con lo in-material, con eso que llamamos alma, o el fuero interno, también llamo a aquello, fantasia.

El día a día es un continuo hacer de esperas, es el latido de un corazón de adolescente, o el adrenalítico pasar de un guerrillero.

La espera de hoy es rutinaria en los comunes mortales que están en la coyuntura de la definición de sus vidas, en la etapa que deben pensar en lo que harán con lo que queda de futuro.

La Espera es una Institución.

Si vas de compras al super, en la carnicería, esperas, en la panaderia, esperas el pan caliente, en la caja...Esperas.

En la casa, antes de salír de compras, antes de desayunar, antes de cualquiér cosa, debes esperar, para ir al baño, para usar lo que no sobra, etc.

Luego en la oficina, o el banco, lo mismo...

Falta que a nivel de ejecutivo o legislativo, legislen al respecto de acuerdo a la realidad del siglo XXI.

De hecho, se ha hecho en el pasado, con las esperas obligadas, pre-y post.natal, pre-universitario, pre-menstrual... Hasta en los deportes es aplicable, esperar que piten los arbitros, que disparen en la salida de las carreras, que entreguen las medallas y que paguen los sueldos..

Un solo ejemplo, que emparenta esta Institución con otra de la misma calaña, es la Burocrácia.

Van de la mano y se confunden, son como siamesas unidas por un solo órgano, no pueden separarse y por si solas morirían. Me refiero a una Institución del Estado, que siendo patrimonio de todos, solo sirve a algunos.

Es injusto generalizar en un tema tan importante y caería en una inconsecuencia si no menciono ahora cual institución o organismo estatal es el aludido, pués en esta categoría son pocos los que se salvan, pero el mas importante y que nos involucra a todos es el BECH.

Hoy se cumplen 47 dias desde que entregué una solicitud de Crédito y debo Esperar una firma...

Mientras sigo esperando y a la vez mis acreedores también esperan, intentaré pensar en otra cosa, buscaré respuestas a mis inquietas preocupaciones, reéncontrandome con los hobbies ya olvidados, con la inspiración que provoca una buena charla a la luz de la luna o mientras esperamos la puesta de sol disfrutando una buena botella de vino tinto o quizás un pisco sour.-

Cuando acabe la espera , volveré a escribír. Nos vemos.-